El 11 de marzo de 2014, el presidente de la Fundación Alberto Jiménez Becerril y alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, acompañado de familiares, amigos y jóvenes alumnos del colegio San Francisco de Paula, homenajearon a las víctimas del terrorismo con la inauguración del "Rincón de la Memoria y la Libertad".
Diez años después de los atentados en Madrid del 11-M, la ciudad de Sevilla rinde homenaje a todas las víctimas del terrorismo con la plantación de un olivo que corona este espacio en pleno centro de la ciudad, la Plaza de la Encarnación, donde además se instaló una placa con la leyenda "No hay camino para la paz. La paz es el camino".
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