miércoles, 11 de febrero de 2015

RESPUESTA - 11 de febrero - PASEANDO POR SEVILLA

En 1868 vivía en la casa número 4 de la calle Marqués de la Mina, cercana a la parroquia de San Lorenzo, Esteban Pérez, maestro albañil conocido por hacer todo tipo de trabajos sin importarle la hora, el momento o el lugar de la obra.

Una noche un caballero le ofreció un trabajo singular por el que le pagaría muy bien pero con la condición de que tenía que ir al lugar con los ojos tapados. Al principio Esteban se negó pero el caballero le apuntó con una pistola y no tuvo más remedio que acceder. Montaron en un coche de caballo y estuvieron caminando durante varias horas hasta que se detuvieron en una casa. Una vez dentro, le quitaron la venda y vió a una mujer atada en una silla e insconciente. El trabajo era sencillo: levantar un tabique tapando la alacena donde se encontraba la mujer.

Terminado el trabajo le vendaron de nuevo los ojos y lo llevaron a su casa. Al cabo de unas horas se presentó ante el Juez de Guardia y le narró lo ocurrido. El albañil recordaba qe cada quince minutos sonaba la campana de una iglesia cercana. La pista fue definitiva: en toda Sevilla, la única iglesia con reloj que marcaba los cuartos era la de San Lorenzo. 


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